Hoy, 12 de agosto de 2014, he recibido la triste noticia del fallecimiento de Robin Williams, un actor de Hollywood caracterizado por ser el protagonista de innumerables películas ensalzadoras de los mejores sentimientos humanos. Sé que éste es un blog de ciencia, pero cómo podemos avanzar en ciencia? . La respuesta es sencilla, la ciencia puede avanzar a través de los científicos, y también a través de gente grande y humilde como Robin Williams. Como prueba a mi afirmación, voy a enumerar algunas de sus películas:
Primera película: "El hombre bicentenario". Trata de un robot que por problemas electrónicos en su interior adquiere conciencia y sentimientos humanos. A partir de ése momento el robot lucha para convertirse en un hombre. Como resumen de ésta película quiero reproducir lo que en una secuencia dice el robot: "Prefiero morir como un hombre, que vivir la eternidad como una máquina”. Y como consecuencia final, quisiera animar a los profesionales de la informática a seguir investigando en el campo de la inteligencia artificial.
Segunda película: "Despertares" (basada en una historia real) . Entre 1918 y 1926 cinco millones de personas en todo el mundo se contagiaron de manera fulminante de una misteriosa enfermedad, identificada como “encefalitis letárgica”, que dejó a un tercio de los afectados postrados de por vida e incapacitados para moverse. Cuarenta años más tarde, aquellos vegetales humanos aún permanecían diseminados por hospitales de todo el mundo hasta que, en el verano de 1969, un joven médico de Nueva York creyó encontrar una solución. Durante algunos días, esos pacientes, tras administrarle un fármaco para el párkinson en dosis elevadas, salieron de su estado vegetativo y pudieron disfrutar de una vida normal. Desafortunadamente, los efectos del fármaco duró poco tiempo y los pacientes volvieron a su estado vegetativo inicial. Tal vez éste haya sido uno de los hechos más reseñables e históricos de la investigación médica hecha por un médico. Ahora quisiera reproducir una diálogo de la película en la que están el doctor y la enfermera viendo los videos de los despertares del paciente Leonard (el cual entabla una profunda amistad con su médico) y el doctor dice: "Usted le dijo que yo era una buen persona. ¿Cree que una buena persona da la vida para luego volver a quitarla?" y ella responde: "a todos nosotros nos dan y nos quitan la vida" -"¿Y eso por qué no me consuela?" -"Porque es usted una buena persona. Porque él es su amigo".
Y para finalizar quiero dedicarle a nuestro querido actor ésta bella canción. Adiós Robin Williams, un verdadero placer ver tus películas: http://www.youtube.com/watch?v=ww8wqEgFIA8